Corea del Norte intentará lanzar otro satélite al espacio
El gobierno de Corea del Norte ha anunciado que intentará lanzar otro satélite después de perder un satélite militar en mayo. Así lo informa Reuters.
Los funcionarios norcoreanos dijeron a la guardia costera de Japón que el lanzamiento se llevaría a cabo entre el 24 y el 31 de agosto sobre los mares Amarillo y Oriental de China.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, calificó el posible lanzamiento de "extremadamente lamentable", mientras que funcionarios surcoreanos lo calificaron de "acto claramente ilegal" que viola las actuales sanciones de la ONU contra Corea del Norte, que está probando tecnología de misiles balísticos.
El lanzamiento previsto sigue al intento anterior de Corea del Norte de lanzar un satélite el 31 de mayo de 2023. Ese lanzamiento terminó en un fracaso cuando el cohete Chollima-1 de Corea del Norte que transportaba un satélite se hundió en el mar al oeste de la península de Corea después de que, según informes, un motor funcionara mal durante la separación de etapas.
Se espera que el próximo lanzamiento tenga lugar desde el puerto espacial Sohei de Corea del Norte, en el noroeste del país, cerca de la frontera con China. Los analistas creen que el lanzamiento es una demostración de fuerza. Las fechas anunciadas coinciden con los ejercicios militares anuales entre Estados Unidos y Corea del Sur.
El presidente surcoreano, Yoon Seok-yeol, el primer ministro japonés, Fumio Kishida, y el presidente estadounidense, Joe Biden, también se reunieron el 18 de agosto para discutir un acuerdo de seguridad trilateral destinado a proteger contra una Corea del Norte cada vez más agresiva.
Actualmente no está claro cuál podría ser la carga útil del próximo lanzamiento de Corea del Norte. En su intento de lanzamiento de mayo, Corea del Norte pretendía lanzar el satélite espía Malligyong-1, diseñado para tomar imágenes de alta resolución de la Tierra para proporcionar inteligencia a los militares.
Sin embargo, después de que el ejército surcoreano recogiera los restos del Malligyong-1 del mar y los analizara, dijeron que el satélite "no tenía ningún propósito militar significativo".
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